Enunciados, sentencias, aforismos, aporías...

 o como dicen los romanos: la jalea está jarta.


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Hay dos razones fundamentales para leer: enterarse de algo o divertirse (enterándose de algo, pero también con la forma de contarlo, o simplemente con la forma de contarlo, que también, y las sugerencias que eso despierta en nuestra maleable mente)

Solo entiendo una razón para escuchar música: divertirse. Si una música no me divierte, con todos los matices que la palabra diversión pueda tener, no entiendo qué me puede motivar a escuchar una música. Así que, por más que me lo expliquen, no entiendo qué pinta Wagner en todo eso. (no, es una broma; a lo mejor si uno pone buena voluntad...)


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Es un barrio tan chungo que estaba paseando por allí con el google map y me atracaron.


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¿Te has hecho poeta? Por eso los diamantes del emperador te parecen muy pequeños. Los poetas son muy generosos, regalan lunas y estrellas. El emperador en cambio, pobrecito, solo puede regalar diamantes. (Xima, en Bearn o La casa de las muñecas, de Llorenc de Villalonga)


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Hay tantos que son calificados como "uno de los principales" poetas, narradores, de un país, una provincia, una ciudad, que parece ya un lugar común pertenecer a tan poblada categoría. Habría que innovar en eso de las alabanzas. Me adelando a mi futuro panegírico:

Riforfo Rex, mediocre narrador, infame poeta que alcanzó la gloria de ser el mejor escritor de su calle cuando murió el otro escritor que allí vivía (en muy claras circunstancias, excuso decir, en las que él no tuvo ninguna implicación). Llegó a escribir, tal vez, y por azar, alguna línea buena que aún está por reconocer.


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De la serie "Fobias Que Faltan"

timerifobia: miedo a ser temido, a que le tengan miedo a uno. Este mundo mejoraría si todos tuviéramos un poquito de esto. Creo. Que nos huyéramos unos de otros, no por miedo al otro, sino por temor a asustarle.


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Guardaos de la levadura de los fariseos y los saduceos, les digo a mis alumnos. Y ellos, con cara de asombrados, porque en efecto han estado pensando en panes, peces, y móviles de última generación , y les ruge el estómago y se les evapora la mente, responden, ¡pero si no tenemos pan!. ¡Qu'in norantes que son, coño! ¿También vosotros sois aún sin entendimiento?, ¡no me prestan atención, joder!, ¿para quién hablo yo? ¡Hombres de poca fe! (reinterpretación de Mateo 16:6)

(disculpen, los que se ofendan, la supuesta irreverencia, pero es que me hace gracia, porque me recuerda a mis clases en la universidad


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Me acuerdo de cuando el teléfono servía para hablar con tus amigos y familiares y no para para que te acosaran a llamadas de vendedores que encima se cabrean contigo porque no les escuchas su robótico discurso (eh, que soy una persona. sí, eso es lo más triste, que eras una persona)



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No hay baratija que no se convierta en una joya lustrosa después de un baño en una solución de auto confianza al cien por ciento.


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Mateo 6:7

Y, orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.

¡Qué buen consejo literario!


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Todos son ladrones, denuncia el ladrón mientras roba. Asesino, grita el que mata... ¡Tienen razón!, admiten los idiotas.


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La infantil manía de destruir lo que no podemos (o no sabremos) poseer.


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Si fueran coherentes en lo de matar al criminal antes de que cometa su crimen, se suicidarían. En eso les descubrimos la trampa, además de en todo lo demás.


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Con el paso de los años se les pudrió el amor y se decían "te quieros" a pedos.


Comentarios

  1. Me he divertido mucho, y además, ¡me he enterado de algo!, un pleno!

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  2. ¡¡¡Divertidos todos y sapienciales unos cuantos!!!

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  3. De esto puedo echarles de comer todo lo que quieran. Tengo un saco lleno.

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